Estimados, me pareciò muy bueno haber leìdo la serie de la Colecciòn Guerrico, recordando a Chiquita Garcìa Arias (nèe de Oliveira Cèzar) en su fantàstica reseña de esta familia coleccionista. En el Tigre todavìa està de pie la casa de Mercedes Guerrico de Bunge, que Manucho inmortalizara en algunas de sus novelas.
Favor tomen nota que la mujer de Otto Bemberg era Sofìa Bengolea, y que Jovita Bemberg (nèe Garcìa Mansilla) nunca estuvo en el entuerto de los tomatazos de la Perona. Era extremadamente fina y sensible como para levantar un tomate.
Es sumamente folklòrico este tema de las familias. Bien lo decìa mi bisabuela: cuando ella era joven, iba a una reuniòn, si habìa un Lòpez, se sabìa que era descendiente del autor del Himno, si habìa un Pèrez era de la familia de Roque, si habìa un Gutièrrez era de la familia de los escritores, y si habìa un Fernàndez era descendiente del protomedicato. La cosa se complicò cuando apareciàn otros Lòpez, otros Pèrez y similares.
Cuando a uno de estos nuevos se les preguntò de què Pèrez eran, la respuesta fue: "De los que andan".
"Sic transit gloria mundi"